Nuevas y revolucionarias estrategias policiales de los mossos de escuadra
He necesitado dos días con sus correspondientes noches, para
llegar a la conclusión de que la nueva estrategia policial de los mossos de
escuadra a la hora de actuar en las algaradas callejeras debe ser algo
absolutamente intrincado, porque yo, con
44 años de profesión no llego a entender.
El Jefe de la Policía catalana habla en televisión de una
novedosa táctica policial. No se equivocó, no, puso en marcha algo inédito
en la forma de controlar y reprimir
manifestaciones violentas.
Creo que policías de
medio mundo están solicitando a este señor
el manual tan maravilloso que ha desarrollado él solito y que tan buenos
resultados le ha dado. Solo ha tenido 25 policías heridos.
A ver si me entero, el gran jefe monta un dispositivo a
todas luces escasísimo, para lo que se veía venir con el 1º de Octubre.
Deja que las masas enfervorecidas de seguidores del
independentismo alentados por el
presidente de la Generalidad y encabezados por los C.D.Rs. Se adueñen de la plaza donde está ubicada la
Generalidad y también la comisaría de Policía nacional en Vía Layetana.
Deja que avasallen, insulten, agredan, arrinconen a los
funcionarios actuantes, obligándoles a replegarse dentro de las instalaciones
dejando que los manifestantes empapelen
el templo de la soberanía catalana
Mantienen a varias secciones
de antidisturbios de vacaciones
Y cuando los antidisturbios
ya no pueden más, cuando alguien es estado supremo de estrés podria haber cometido una barbaridad, es cuando aparecen los patrulleros, en camisa de manga
corta, sin casco muchos de ellos y luego
las unidades antidisturbios actúan….
Los alborotadores
huyen despavoridos y creo que no por los porrazos que les puedan las los
antidisturbios, sino más bien creo por el impacto emocional que les produjo ver
llegar a los patrulleros insuficientemente equipados.
Maravillosa y
rocambolesca manera de justificar lo injustificable, la carencia de medios, la imprevisión, la connivencia,
la desidia y además , estoy convencido de que le importa una mierda si descalabran o matan a uno de
sus agentes.
Para ponerse a llorar.
Decía el poema que es triste ser ciego en Granada, pero a la zaga le va ser mosso en Cataluña
muy gallito el señor cacareando desde su pedestal
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